lunes , 6 mayo 2024
En busca de proponer y ampliar más y mejores productos sin TACC, Agustín Parma creó una compañía que produce pastas para los celíacos. A continuación, su historia y las claves que le permitieron posicionarse rápido en el mercado.
La escasez, los altos precios y la necesidad del público celíaco de adquirir más variedad y productos libres de gluten, hicieron que Agustín Parma y otros cuatro socios más crearan Wakas, una compañía que se encarga de producir pastas sin gluten. Siendo el significado de su nombre “lo sagrado” en quechua (lengua originaria de Los Andes), en 2015 salieron al mercado para ofrecer una propuesta diferente a la comunidad celíaca.
“Trabajamos acorde a las necesidades de nuestros clientes, para ello contamos con un área de investigación y desarrollo que viene trabajando en la búsqueda de nuevos ingredientes y procesos de elaboración”, se presentan desde la empresa que tiene a Juan Cruz Valenzuela a cargo de la presidencia y a Parma, como vicepresidente y gerente general.
La posibilidad de crear un producto sin gluten que se asemeja a los http://www.viagrabelgiquefr.com/ sabores y a los gustos de los productos “tradicionales” o basados en sémola de trigo, fue clave para que la empresa tenga una adaptación y, sobre todo, una aceptación rápida en un mercado que exige nuevas, diferentes y variadas propuestas para sus consumidores. En su entrevista con Multitaskers, Parma explica que, a través de infinitas pruebas, la marca logró un “blend de harinas” que logra una pasta muy “similar a la tradicional y prácticamente sin diferencias” y con las propiedades nutricionales de los llamados “supercereales” como la Quinoa, el Amaranto, y también el Maíz.
Por otro lado, el cofundador de la compañía manifiesta que entender hacia “dónde va el consumo de alimentos”, y las tendencias que vinculan “los hábitos saludables tanto de la alimentación como así también de los modos de vida”, fue clave para su expansión. La toma de conciencia a nivel mundial y local sobre estos temas (sobre todo la problemática de la celiaquía), fue una puerta importante para crecer.
Este camino fue acompañado por múltiples herramientas de comunicación que ayudaron a la difusión del nuevo producto. Entre ellos, el actual vicepresidente, menciona al servicio de prensa contratado, con quienes se asegura, mes a mes, estar presentes en los medios “con diferentes propuestas comunicacionales transmitiendo los mensajes clave que la marca desea”. Bajo la misma línea, remarca el rol que tiene las redes sociales en la actualidad y la creación de diferentes inciativas comunicacionales como: gráficas, fanpage, comentarios y recetas en revistas especializadas en salud.
Más allá del nuevo producto, su presentación y muestra, hay una porción del trabajo que fue logrado con una acción fundamental: la asociación. Parma, a la hora definir su negocio, sostiene que tienen un estilo “asociativo”, es decir, que busca sobre todo, “priorizar” las relaciones con sus clientes y proveedores, generando relaciones “duraderas, serias, honestas, y donde la rentabilidad sea compartida”. “Cuando creamos Wakas, partimos con una base de profesionalismo de todos los socios, intentando optimizar la relación capacitacion-innovacion-experiencia, elementos claves para ser un emprendedor relevante y competitivo”, redondea Parma al sitio.
En base a su experiencia personal, que incluye la creación de Marlom’s -una compañía especializada desarrollo, producción y comercialización de popcorn para microondas- se dirige y aconseja a los emprendedores: “Se debe tener en cuenta que, si bien es muy gratificante, también es muy sacrificado y muchas veces los frutos tardan en llegar. Es común no tener claro hacia dónde ir, hay mucha incertidumbre”, sobresalta en su entrevista con Multitaskers. Es por tal motivo, que agrega que es muy relevante “estar dispuestos a dar pelea” porque “surgen muchos obstáculos”, ser perseverante y adquirir “el olfato para la toma de decisión con poca información”.
Al referirse al país y las oportunidades que ofrece al emprendedurismo, Parma sostiene que existen las chances para invertir, “por ser tan volátil”, pero aclara que la pregunta que hay que hacerse es: ¿qué nivel de riesgo está uno dispuesto a asumir? Es en base a esta pregunta que manifiesta que es crucial “contar con el olfato para encontrar el nicho con necesidades insatisfechas”, donde el emprendedor tiene que analizar “en cuál puede ofrecer un producto competitivo”.